¡Lentamente!
Desde mi primer día hasta mi último pensamiento
El ser remoto me trasciende
Transita el universo más grande
El peso de su regreso sobre los hombros en un pasado ceniza
Y se descuelga en un lento aleteo de mariposas
¡Inmensamente despacio!
En la áspera ansiedad temo a la inexistencia
vislumbro su infinito cubierto de inmensidad e imágenes
la parsimonia de sus segundos
al vértigo amanecido
envejecido, asomo a sus días más fríos,
con el hielo de la infidelidad, invisible, ¡Tenebris!
Tal se esconde entre derrota y derrota
Abrasivas tragedias,
me dejasteis sin mis deseadas respuestas
vagando sobre el suelo de extrañas alegrías,
aturdido en mi vesania frente a la mirada del viejo fauno
de dramáticos astados
y amenaza de retoños
¡Lentamente! Asumí el infierno en el espejo
profecía a la contra de su traslúcido y divino cristal,
visiones del agrio cornejo
con la plenitud del átomo viajero
retorciéndome entre vencidos recuerdos
El pálido número
Un anónimo hombre, de nombre perdido
Sus cartas prohibidas apelando a las purezas
y "aquel día" aplastado por sus pesos
Me quedé desnudo
y el deseo desapareció
mirada al mar abierto de mi gris pensamiento
y el deseo volvió a desaparecer...
tan solo fue el sonido precoz de la Creación
Mirar las estrellas
sintiendo su abrasiva luz
oculta en el interior de mis huesos
la alargada faz del tiempo
el abrazo de mi conciencia
¡moriría de demencia! a salvo del mal que todo lo persigue
Aún así, me retuerzo entre los extremos, aquellas puntas siempre finitas, llegan a los límites de los universos. Acaríciame en tinta, siempre oscura como la noche, con sus niñas perdidas. La maldecida inocencia. Me retuerzo y me regodeo en los extremos, sobre aquellas miradas que nada me aportaron
JLcollado
