Primera flor
La negritud es un mar de explosión
¡Embellecedora de muerte!
Es la virtual mirada del niño eterno
Atrapado en las penumbras de la tupida arboleda, bajo sus gritos y sus silencios
Absorbí el orbe, derramando ante nosotros su creación, un argos delineando mi terminado día
Allí amé
Segunda flor
Un inquietante albedo marca la inquietante sonrisa del cisne
¿Por qué temo a la soledad de los espectros?
Su amenaza hace sombra en mis ojos, en su montaña ausente del tiempo destruyendo la meseta.
Fueron luciérnagas en la oscuridad y hoy son un vasto cementerio de apagadas cerillas
¡Tan pequeño suena un grano en la inmensidad del universo!
Mi Tercera flor
Qué incómoda es la herencia de la cuna hasta conquistar la eternidad de los ataúdes
Pero yo escucho en sus espejos un intervalo en el crujir de la inmensidad
Y os señalo su oscuro cortejo de fuegos artificiales, balbuceando entre flores de Marte
Quizás duermas hoy entre su olor probado
Quizás giren las agujas del reloj en el contratiempo de la profundidad de otro oscuro mar
JLCollado