I la mujer del pueblo
Y que emerja el madero rojo
en su tremendo despertar
con olor al pegajoso caucho de ebrio verano y lúgubres portales
extrañados en sus intensos vacíos
En su vieja carne anochecida
y sexo enquistado
se fabrican los infiernos
con un temblor de manos agarrando oscuridad
y vivo veneno
Un sinónimo de mujer
busca el barco crisálida en la noche
mientras una espiga ardiente
roza su espalda desnuda de huesos
de trenza caoba
dibujando la lluvia sobre esta piel marcada
Soy un leviatán en el roce de su pensamiento
frágil voluntad rompiendo con un estrépito
de risueña meretriz
II mesías de las fábricas
Mortecinas noticias de cristal, sombrías luces en rojo y negro,
descubren tras cortinas prohibidas besos de escapulario
Niegan con insultos la idea del pájaro brillante
a sinuosos labios cerrados y ebrios de abrupto cielo
/La ansiedad es el bramar destruyendo sus caras/
Hominum cayendo
Telcos que desgarran
al calor del narcótico
las viejas ropas
Un sueño escapando tras el sueño
de girones de fe expuestos
en la ignota plaza del muerto
y al alto concepto resucita
El grito despierta
a los silencios acomodados
y el dolor es frente de semilla como sangre de pan
anunciando el regreso al puerto
III Sueños del pájaro preso
Seguiré
bajo la lluvia ciega
de pie
el tiempo necesario
hasta encontrar mi huella entre olvidos
Yo jamás más lloré debajo de un árbol
La palabra negra del verdugo despierta mis instintos,
en el jardín de las tullerias,
no soy dueño,
ni el temor de un triste abedul por perder su sombra frente a la máquina
Suelo y Ser
alma de metrópoli enjaulada
aún aplastado por el ruido seco
aún aplastando el ruido manso
impaciente en su desconsuelo
Y ayer... el pulcro silencio,
visto al nacer como un río de guerra
y en su sequedad
la profundidad de un oscuro destino
devorando libertades
Nada ha cambiado con el golpe de la ola
mi erosión observando tras el barro
IV Tribulación
Cómo trepan las arañas
Entre la humedad de la maleza y del drama en la sangre
Trepan por los muros de la guerra
Sembrando zanjas para sus cadáveres
Del agua en la laguna
Nada queda/ salvo el alma
JLCollado