Te agarras
dulcemente a mi muerte
Y yo ando descalzo en tus vuelos
sobre los sonidos del último desgarro
Apenas soy un leve rasgo
en la palma de tu mano hambrienta
Plumas de apariencias que sueñan
en las riberas de mi ciudad dormida
resguardada
de hombres salvajes
de mi vida inyectada
por soliloquios recuerdos
Antes que la irradiación en mi ceguera
vislumbré una media noche envioletada
/el agreste corazón/
seco de barbitúricos semblantes
De bellos rocíos mintiéndome
¡Qué tarde llegan hoy las sombras a mi
destino!
<>Autor<>
José Luis Collado Novillo
No hay comentarios:
Los comentarios nuevos no están permitidos.