Esa ventana abierta
me hizo temblar
Se hizo oscuridad en mi ropa encogida
Enrojecida mi frente de muerte. Muerte es la señal...
Y un ojo ardiendo es el culmen de la batalla
¡Quién supiera extender el hilo de la muerte
ante el precario aleteo de la mariposa!
mordiendo con mil dientes tus sombras
simulo ser un hombre herido
Pero yo ya habría muerto
y mi corazón se hunde en la piedra
¡Quién a los árboles sueña entre altos dibujos!
Afirmado soy en su figura estremecida
cuando soplado es el último viento
ocaso de mi aliento, de extinguido exilio
Sobre agua rotunda flotarían los pechos de la amante gloriosa,
de lujuria su tiempo hecho,
radiante abedul abandonado entre la suma oscuridad
de tristeza en bosque apilado;
¡ansiedad, ansiedad, déjame amarte,
entre la flojedad de todos mis vientos!
JLCollado
ante el precario aleteo de la mariposa!
mordiendo con mil dientes tus sombras
simulo ser un hombre herido
Pero yo ya habría muerto
y mi corazón se hunde en la piedra
¡Quién a los árboles sueña entre altos dibujos!
Afirmado soy en su figura estremecida
cuando soplado es el último viento
ocaso de mi aliento, de extinguido exilio
Sobre agua rotunda flotarían los pechos de la amante gloriosa,
de lujuria su tiempo hecho,
radiante abedul abandonado entre la suma oscuridad
de tristeza en bosque apilado;
¡ansiedad, ansiedad, déjame amarte,
entre la flojedad de todos mis vientos!
JLCollado